Fecha y hora: sábado 20 de junio de 2020.
Lugar: varias ciudades de todo el Estado español.
La campaña Plan de Choque Social, con más de 500 organizaciones adheridas en todo el Estado (entre ellas, la APDHA), lleva desde el inicio del estado de alarma por la pandemia exigiendo medidas que pongan la vida en el centro. Desde la diversidad estamos sumando esfuerzos porque no vamos a consentir que esta crisis sanitaria, social, económica y de cuidados se convierta en una nueva excusa para aumentar el deterioro ecológico y climático, el empobrecimiento de la clase trabajadora y la vulneración de los derechos fundamentales. Consideramos que las medidas que se han tomado hasta el momento para hacer frente al impacto económico y social del COVID-19 se quedan cortas en la protección de la mayoría de la sociedad, excluyen a los sectores más empobrecidos y no han tocado los privilegios de las élites ni los beneficios de las grandes empresas. Dejar en manos de la patronal, los especuladores y otros poderes económicos nuestras vidas y derechos nunca fue una opción y está provocando graves consecuencias sociales. Durante los últimos tres meses hemos planteado propuestas urgentes desde los sindicatos, organizaciones y plataformas antirracistas, feministas, ecologistas y sociales para hacer frente al colapso que suponían un rumbo diferente y otro modelo. A la vez, el apoyo mutuo y la autoorganización popular han llegado a dónde ningún Gobierno lo hacía para hacer frente a la emergencia.
El estado de alarma va a finalizar, pero el aumento de la precariedad y la vulnerabilidad que se han producido durante la pandemia se quedan. Las privatizaciones y recortes que han mermado la capacidad de los servicios públicos, y en especial de la sanidad y las residencias, de responder a una situación de emergencia no desaparecen. Las injusticias y desigualdades que se han hecho más evidentes durante el confinamiento siguen ahí. Las personas que sostienen los “servicios esenciales” siguen ahogadas por la precariedad. En este sentido la «nueva normalidad» se parece mucho a la vieja. Es el momento de exigir responsabilidades y luchar por cambios profundos. Es la única manera de proteger la dignidad de todas las personas y prepararse para nuevas emergencias sanitarias. Las últimas semanas, a medida que avanzaba el desconfinamiento y dejábamos atrás el brote, se están produciendo muchas movilizaciones en defensa de la sanidad pública, contra el racismo y por la regularización de las personas migrantes, contra las violencias machistas, huelgas laborales, por una transformación ecosocial justa o por una renta básica, entre otras. No podía ser de otra forma. En un momento en que las calles vuelven a llenarse había que recuperar también la protesta en el espacio público dada la gravedad de la crisis. Si se puede salir para trabajar, consumir y reactivar la economía también tiene que ser posible la reivindicación con las precauciones necesarias. Las de abajo tenemos que dar una respuesta a la altura de los problemas que sufrimos.
Por estos motivos, el próximo sábado 20 de junio convocamos una jornada de movilización descentralizada y plural por un Plan de Choque Social. En algunas ciudades hemos confluido con otras movilizaciones en defensa de la sanidad pública o que exigen #RegularizaciónYa. Desde la solidaridad, la organización colectiva y la movilización queremos defender una salida justa a la crisis que necesariamente debe incluir como mínimo estos cinco ejes:
- Repartir los trabajos y la riqueza. Derogar las reformas laborales del PP y del PSOE. Establecimiento de una renta básica incondicional.
- Gestión pública de todos los servicios públicos y los bienes comunes. Recuperación de todos los servicios públicos privatizados y de los bienes comunes en manos de las grandes empresas.
- Garantizar la vivienda digna. Prohibición de los desahucios y suspensión del pago de los alquileres hipotecas y suministros. Ni deudas ni desahucios
- Garantizar y defender los derechos y las libertades de todas. Regularización inmediata de todas las personas migrantes. Medidas urgentes contra las violencias machistas.
- Rescatar a las personas y no al IBEX35: Retorno del rescate bancario y reforma fiscal. Que la crisis la pague la Troika, la banca y el Ibex35.
Por supuesto, pedimos a todas las personas que participen de las convocatorias que sigan las recomendaciones sanitarias como llevar mascarilla y mantener la distancia de seguridad, tanto por responsabilidad hacia las demás personas como por respeto al personal sanitario y su esfuerzo.
Si tenemos en cuenta la realidad andaluza, observamos que la precariedad y la exclusión social se ceban especialmente con nuestra tierra, fruto de un modelo económico fuertemente basado en el turismo y la explotación de los recursos naturales. Por ello, desde el Plan de Choque Social también tenemos demandas concretas a nivel Andaluz:
- Esta nueva crisis ha mostrado la fragilidad y vulnerabilidad de un sector basado en la precariedad, la temporalidad, el consumo de recursos y la contaminación. Un modelo turístico que más allá de la economía y el empleo, tiene impacto en muchas otras esferas de nuestra vida, como la vivienda, el comercio, el espacio público, el transporte, el medio ambiente, etc. Por ello consideramos fundamental trabajar para diversificar la economía; distribuir la inversión, apostando por poner en valor el gran potencial que tiene nuestro territorio; crear una fiscalidad específica para el sector, de manera que los beneficios reviertan en Andalucía; asegurar que se trabaje asegurando los derechos laborales; apostar por un urbanismo inclusivo y participado por la población; establecer moratorias para los alojamientos turísticos y estudiar el impacto que está teniendo en nuestros territorios; fomentar el pequeño comercio de proximidad; recuperar espacio público para su uso compartido y gratuito; apostar por un transporte público de calidad, así como el uso de otras formas más sostenibles de movilidad, reduciendo también la contaminación y el consumo de recursos naturales. ¡El turismo no es la solución!
- Si nuestra Andalucía estaba ya instalada en el furgón de cola de la pobreza y marginación, la COVID-19 ha disparado todas la carencias sociales existentes. Amplias capas de la población dependientes de la economía sumergida y numerosos sectores vulnerables se ha visto abandonados por un Estado que los vuelve a invisibilizar. Las redes de apoyo mutuo y los colectivos sociales fueron los únicos que desde el minuto uno acudieron al rescate. La ineficaz y burocrática Renta de Inserción Social andaluza sigue sin llegar a miles de familias empobrecidas. El recientemente anunciado Ingreso Mínimo Vital sólo es un paliativo insuficiente que no apunta a la raíz del problema. La Renta Básica de choque se nos presenta como la solución más simple y efectiva con la que enfrentar la verdadera pandemia que asola nuestra tierra: la desigualdad.
- Poner en valor el medio rural como una de las fortalezas de Andalucía. Reemplazar las lógicas extractivistas y basadas en el monocultivo por formas respetuosas con nuestro entorno que favorezcan el autoconsumo y el comercio local. Apostar por la vertebración del territorio para acabar con el aislamiento de algunas zonas rurales. Acabar de una vez con los grandes latifundistas y garantizar las condiciones laborales de quienes trabajan en nuestros campos. ¡La tierra pa quien la trabaja!?
La crisis de 2008, trajo consigo importantes derrotas, pero también grandes aprendizajes. Parte de la sociedad despertamos del letargo en el que vivíamos y tomamos las calles para gritar alto y claro que “no somos mercancía en manos de políticos y banqueros”. Esta crisis nos ofrece una nueva oportunidad para cambiar el rumbo, reemplazando un sistema que solo tiene en cuenta los beneficios y los indicadores macroeconómicos por otro que priorice el bienestar de las personas, y que sea especialmente sensible a las realidades de los sectores más vulnerables. Es hora de desempolvar viejas consignas y alzar la voz para decir que nuestras vidas valen más que sus beneficios y que sus crisis NO LAS PAGAMOS. Pero también de abrazar con fuerza las reivindicaciones feministas, antirracistas, ecologistas y anticapitalistas, reconociéndolas como elementos imprescindibles para cambiar el mundo.¡¡POR UN PLAN DE CHOQUE SOCIAL QUE NO DEJE A NADIE ATRÁS!!
#20JPlanDeChoque
#20JYoVoy
@PlanDeChoque
@planchoque_AND