Ante las conclusiones a las que ha llegado la Comisión Mixta de los Derechos de la Mujer del Congreso de los Diputados en relación al tema de la prostitución la Plataforma por los Derechos en el Trabajo Sexual quiere manifestar:
1. Que lamentamos profundamente dichas conclusiones ya que dejan totalmente desprotegidas a las mujeres que ejercen la prostitución y reafirman la vulneración de derechos a las que hoy están sometidas.
2. Que los trabajos1 que ha desarrollado esta Comisión así como las conclusiones a las que ha llegado no son en absoluto objetivas ni rigurosas sino que adoptan un punto de vista sesgado y cargado de prejuicios morales que no tiene en cuenta la realidad concreta de las personas trabajadoras del sexo. Así, aunque en dichas conclusiones se reconoce que no existen estudios fiables sobre la realidad de la prostitución todas las medidas que se proponen parten del prejuicio de que sólo una mínima parte de la prostitución se desarrolla de manera voluntaria, concluyendo que “no tiene sentido diferenciar la prostitución coaccionada de la voluntaria”.
3. Que, tanto en los trabajos1 de dicha Comisión como en las conclusiones finales se equipara constantemente la prostitución voluntaria con la trata de de mujeres con fines de explotación sexual. Esta equiparación adolece del mínimo rigor científico y práctico y tiene como consecuencia la invisibilización de todas aquellas personas que ejercen la prostitución de manera voluntaria y que deberían haber sido contempladas también como sujetos de derecho desde el punto de vista legislativo.
4. Nos asombra la tergiversación que se hace de los artículos 9 y 14 de la Constitución para negar la consideración de la prostitución como un trabajo, cuando esos mismos artículos junto con el artículo 35 que garantiza el derecho a elegir trabajo sirven para recomendar justamente lo contrario: la necesidad de que se acabe con la discriminación que sufre este sector de trabajadoras por el hecho de ofrecer servicios de carácter sexual. La ideología discriminatoria que juzga a las mujeres en función de su comportamiento sexual sigue presente en las conclusiones de la Comisión.
5. Nos preocupa especialmente la falta de transparencia que ha guiado los trabajos1 de esta Comisión, en la que ha sido imposible enterarse del contenido de las comparecencias hasta que éstas no han concluido. Así mismo, los sectores no abolicionistas que hemos comparecido no hemos sido tenidos en cuenta a la hora de las conclusiones por lo que nos sentimos utilizados para justificar una Comisión que no ha sido para nada objetiva en su trabajo.
6. Apoyamos el voto particular que ha elevado Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya Verds a la mesa del Congreso de los Diputados y compartimos la filosofía en la que se sustentan los votos particulares de este grupo, de Eusko Alkartasuna y Esquerra Republicana de Catalunya.
7. Nuestro total desacuerdo con unas Conclusiones en las que se niega el derecho de las personas adultas a ejercer la prostitución, negándoles su capacidad de consentimiento y tratándolas como sujetos menores de edad. Nos preocupa especialmente que en una sociedad democrática y plural como la nuestra, una Comisión del Congreso se deje llevar por posiciones morales particulares que sirven para justificar la negación de derechos a un sector de la población.
8. La Plataforma por los Derechos en el Trabajo Sexual reiteramos nuestra voluntad de seguir luchando por que se garanticen los derechos de todas las personas que ejercen la prostitución. En este camino nos parece fundamental el reconocimiento de la prostitución como un trabajo que también es ejercido de manera voluntaria y el consecuente reconocimiento de derechos que se derivan de ello.
PLATAFORMA POR LOS DERECHOS EN EL TRABAJO SEXUAL
La Plataforma está formada por los grupos Hetaira, Cogam, Fundación Triángulo y Transexualia de Madrid, CATS de Murcia, Licit, Genera, LLoc de la Dona y Àmbit Dona de Barcelona, Col.lectiu Lambda de València y APDHA de Andalucia