COMUNICADO DE APDHA-SEVILLA SOBRE LA SITUACIÓN DE LOS CHABOLISTAS DE LOS BERMEJALES

Casi tres meses después de que se produjera el desgraciado incidente que acabó con la vida de un adolescente en el Polígono Sur, las cerca de 300 personas que salieron huyendo de una posible venganza de la familia del joven siguen acampadas en las peores condiciones al lado del río. En este tiempo han nacido tres bebés que viven con ellos y decenas de niños para los que el curso terminó en abril.

Desde Derechos Humanos denunciamos:

La situación de abandono insoportable en la que se encuentran estas personas.

El incumplimiento de derechos básicos, como el de seguridad, que les afecta. No es de recibo que unas personas no puedan volver a sus casas por miedo y que ninguna instancia las proteja. La dejación de funciones por parte de nuestras autoridades en este asunto es intolerable e inexplicable.

Tampoco es aceptable que estas mismas personas pierdan el derecho a una propiedad que compraron en las condiciones que el mercado y el Ayuntamiento de Sevilla les impusieron y que ahora se les reclamen títulos de propiedad; cuando se les entregó una cantidad irrisoria para que resolvieran por su cuenta el problema de la vivienda, era de todos conocido que sólo podían hacerlo en las condiciones que al final lo hicieron. Las mismas condiciones en las que viven miles de sevillanos en barrios marginados, como Los Pajaritos, Torreblanca o el Polígono Sur pero que gozan de un estatus de respeto un poco mayor por parte de las de las instituciones, al punto de que nadie pondría en duda la propiedad de su casa, independientemente de que hayan hecho las transacciones para adquirirlas al margen de la ley.

Desde que se instalaron en el puente de San Juan hace casi dos décadas, la actuación de las diferentes administraciones públicas ha sido lamentable y vergonzosa. Debemos recordar que primero trasladaron a estas familias juntas al barrio de Bermejales, en medio de la nada, en la entrada sur de la ciudad. Se dijo que sería algo temporal hasta que se buscasen viviendas adecuadas y allí estuvieron, cada vez más abandonados, hasta que el lugar donde estaban asentados fue objetivo de la especulación urbanística. El Ayuntamiento se comprometió primero a realojarlos entre las viviendas que allí se iban a construir, pero cediendo a las presiones racistas y xenófobas de algunos vecinos, optó por darles dinero en mano a cambio de que se fuesen. Fueron a parar a una de las zonas más deprimidas de nuestra ciudad, el Polígono Sur, aumentando aún más la presión social que ya existía en el barrio. Se creó una Comisión de Investigación que resultó ser una auténtica farsa, pues nadie se hizo responsable de aquel atropello.

Año, tras año (desde julio de 2004) el Ayuntamiento ha ido incumpliendo sus promesas a los vecinos del Polígono Sur, que les pedían una solución a la problemática de estas personas, que pasaron de una situación de chabolismo horizontal a otra muy similar de chabolismo vertical (en pisos) en una zona de la ciudad bastante deteriorada y deprimida.

Con estas familias chabolistas, en ningún momento se ha procedido según lo que nuestra asociación viene pidiendo desde hace tiempo: viviendas en régimen de alquiler (no en propiedad), ubicados por toda la ciudad y su área metropolitana (nada de guetos) y con un seguimiento y apoyo a estas familias antes, durante y después de su realojo. ¿Cuánto dinero gastado inútilmente? ¿Cuántas penalidades deben pasar estas familias hasta que se comiencen a trabajar con ellos como es debido? ¿ciudadanos con plenos derechos y obligaciones?

Proponemos a nuestros responsables políticos un poco de dignidad y que se solucione este asunto con urgencia y en el camino adecuado.

De momento lo más urgente es adecuar un espacio donde las familias puedan quedarse hasta que se les encuentre una solución definitiva. No se puede tolerar que no puedan regresar a sus antiguas viviendas para recoger sus pertenencias, que vuelvan a vivir en chabolas sin agua potable, ni aseos, ni asistencia sanitaria adecuada a quien la necesite, que los críos estén varios meses sin escolarizar, sin poder cocinar…. Condiciones todas ellas que violan la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Sevilla, 15 de junio de 2009

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