La falta de voluntad política tras sucesivas legislaturas nos ha arrojado a la clandestinidad que, ante la situación actual, se agudiza poniendo en riesgo nuestra vida. Las trabajadoras sexuales no tenemos derecho al salario, ni a la prestación por desempleo, ni a baja laboral, lo que significa que tanto nosotras como los menores que muchas tenemos a nuestro cargo vivimos al día. Tampoco disponemos de nómina de trabajo, por lo que no tenemos garantizado el derecho a la vivienda y, muchas veces, acabamos residiendo en nuestra habitación de trabajo, que pagamos diaria o semanalmente. Si no trabajamos, nos quedamos en la calle. ¿En qué casa, piensan las autoridades políticas, vamos “a quedarnos” ? ¿Qué se espera que hagan quienes captan a su clientela en la calle: seguir sufriendo las mismas sanciones de la Ley mordaza que les llevan aplicando desde 2015?
Responsabilizamos a la clase política de la situación que atravesamos y de la ausencia de medios, recursos y alternativas para reducir nuestra vulnerabilidad económica y vital. Un Estado que nos hostiga y multa en las calles, no reconoce nuestros derechos, cercena el acceso a la vivienda y al sistema sanitario. El mismo Estado que en 2003 reconocía a la patronal que, suponemos, se beneficiará de las medidas que se brinden al empresariado para enfrentar la crisis. Os interpelamos: somos una realidad, no un debate.
Responsabilizamos a las entidades abolicionistas que atienden a quienes ejercemos la prostitución, frente a las cuales demandamos información, medidas y recursos: ¿qué clase de atención se nos va a dar?, ¿dónde estáis? Al movimiento abolicionista que celebra el virus tildándolo de aliado, de abolovirus, porque acabará con nuestro trabajo, les recordamos: también con nosotras. Ya es hora de que se ponga sobre la mesa que este es un discurso de odio que reproduce el estigma calificándonos de grupo de riesgo, cuando no de delincuentes o, en su versión actual, de proxenetas. ¿Cómo os estáis organizando para salvarnos ahora?, ¿dónde están vuestras alternativas, fondos y opción a vivienda?, ¿qué vais a hacer por las compañeras que tengan que pagar la plaza para tener un techo en el que quedarse? Sin derechos, clandestinas y criminalizadas, nos representan como víctimas cuando encarnamos la supervivencia y la resistencia de una clase popular que se saca las castañas del fuego. Recurrimos a la solidaridad ciudadana, a las compañeras feministas, que ponen en el centro la vida antes que la ideología, y a nuestras vecinas.
– Iniciamos una campaña para recolectar dinero destinada a generar un fondo de emergencia para las compañeras que se encuentran en una situación más vulnerable y precaria. Acceso a través de este enlace:
– También interpelamos a las entidades abolicionistas y a la industria del rescate para que, por una vez, dejen de lado las siglas partidistas que rigen sus intervenciones y contribuyan poniendo a nuestra disposición los recursos con los que cubrir las necesidades básicas de nuestras compañeras: la canasta de la compra, acceso al banco de alimentos, cuidados de nuestres hijes, apoyo psicológico, atención sanitaria y medicinas. El abandono de nuestro colectivo ante tal situación de emergencia es una clara vulneración de los Derechos Humanos. Súmate: coalicionestatalts@gmail.com
Colectivos firmantes:
- AFEMTRAS
- Colectivo de Prostitutas de Sevilla
- Putas Indignadas
- Putas Libertarias del Raval
- (N)O.M.A.D.A.S – Oficina de Migración y Atención a la Diversidad Afectivo-Sexual
- Sección Sindical de Trabajadoras Sexuales de la IAC
- Sindicato OTRAS
- Aprosex