Han demolido 14 chabolas mientras sus habitantes estaban trabajando en la campaña de Logroño
Huelva, 19 de octubre de 2022.- El martes 18 de octubre asistimos, en compañía de varias asociaciones, a la rueda de prensa convocada en el asentamiento chabolista de Las Madres, para denunciar la falta de voluntad de las administraciones para poner fin a las deplorables condiciones de vida de miles de personas migrantes que malviven en dichos asentamientos.
La convocatoria se realizó en ese asentamiento porque se pretendía evidenciar, ante la opinión pública, la demolición de 14 chabolas mientras los habitantes de las mismas se encontraban trabajando en la campaña de Logroño. No obstante, el acto despertó un escaso interés mediático.
Esta práctica no es nueva, las demoliciones se han llevado a cabo también en los municipios de Lepe y en Lucena del Puerto, este mismo año, donde en los meses de verano, mientras muchas de las personas temporeras se ausentan de los asentamientos para trabajar en otras campañas, destruyen las chabolas junto con las pertenencias de ellas, y de paso, el único lugar donde pueden vivir. Da la sensación de que el Plan de Erradicación del Chabolismo, se tratara de esta estrategia.
En el mes de mayo, el Secretario de Estado de la Agenda 2030, Enrique Santiago, mantuvo una serie de reuniones con las administraciones y demás sectores implicados para comenzar a poner fin los asentamientos. De esa reunión resultó un documento que recogía, de manera unificada, las propuestas de diversas asociaciones, para poner fin a esa situación.
En el mes de junio se anunció en el Senado que el Gobierno y la Junta de Andalucía firmaban un protocolo de acción para poner en marcha de soluciones para el colectivo de temporeros que habitan en esas infraviviendas y que, además, en los municipios de Lepe y Moguer, se habilitaba una partida de 5 millones de euros. Aún se desconoce qué ha sucedido al respecto.
La campaña de los frutos rojos se acerca y aún no hay ningún sitio habilitado donde alojar a todas las personas que migran para trabajar en la provincia. En Lepe, por ejemplo, ya hay personas viviendo en tiendas de campañas diseminadas por el pueblo. Este municipio, en particular, ha sido el más radical frente al levantamiento de nuevas chabolas, dado que hay vigilantes en estos espacios.
Tal medida se explica, desde la alcaldía, debido a que parte del plan de erradicación del chabolismo consiste en la adecuación del albergue municipal, cuyas obras deberían estar finalizadas en este mes de octubre. No obstante, sigue siendo insuficiente el espacio para albergar a las miles de personas que trabajan en el sector agrícola durante los meses más intensos de la campaña.
Por todo lo anterior, desde la delegación de Huelva de la Asociación Pro- Derechos Humanos de Andalucía, no nos cansaremos de denunciar la vulneración permanente e histórica de los derechos fundamentales de las personas que trabajan en el sector agrícola onubense. Las administraciones no pueden permanecer ajenas ante este fenómeno que llevamos denunciando año tras año.
Exigimos, una vez más a las autoridades de la provincia acciones que de una vez por todas solucionen el déficit habitacional, ya que las personas temporeras merecen un lugar donde vivir seguras. La historia de los incendios, de las demoliciones y de personas en situación de calle se frenaría si se logra dar alojamiento digno.
Una vez más, constatamos la ausencia de voluntad política que ponga fin a dos décadas de asentamientos chabolistas en la provincia.