El pasado 10 de octubre el Parlamento europeo aprobó por aplastante mayoría un nuevo sistema de vigilancia de las fronteras exteriores de la UE, Eurosur. La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía – APDHA, junto a muchas otras organizaciones, está extremadamente preocupada por la amenaza que esto supone para los derechos humanos de los migrantes y los solicitantes de asilo.
El objetivo de Eurosur es “mejorar la detección, prevención y lucha contra la inmigración irregular y la delincuencia organizada”. Poner al mismo nivel la inmigración que la delincuencia muestra a la perfección la ideología que subyace tras este nuevo sistema que refuerza la Europa Fortaleza, tantas veces denunciada.
Eurosur funcionará en cooperación directa con Frontex (Agencia Europea de Fronteras) con un presupuesto de 3.520 millones de euros para el periodo entre 2014 y 2020 [1], además de cooperar con las autoridades nacionales en un intercambio de información que no se detalla y que preocupa enormemente a los garantes de los derechos fundamentales por el uso que se pueda hacer de estos datos personales.
En lugar de priorizar las operaciones de rescate, la UE crea y dota de generosos fondos a sistemas de represión migratoria destinados a impermeabilizar las fronteras.
No sólo eso, sino que lo hace con tal hipocresía que, en el anuncio de la creación de Eurosur, afirma que ayudará a “prevenir las tragedias en el mar relacionadas con la inmigración clandestina”.
La APDHA denuncia la actual política migratoria de la UE, en la que Europa asesina a las personas que intentan llegar al continente. La creación de herramientas como Eurosur sólo inciden aún más es la insolidaridad europea, que olvida el artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH), que afirma que “toda persona tiene derecho de salir de cualquier país, incluso del propio”.
Andalucía, 25 de octubre de 2013