Por otra, la Asociación Maliense de Expulsados (AME) denuncia que España está vulnerando el acuerdo que en 2008 suscribió con Mali, a través del cual el país africano se comprometía a admitir las repatriaciones desde España de sus nacionales y de terceros países que en teoría hubieran partido de Mali, a cambio de que España incluyera a ciudadanos malienses en los contingentes anuales de trabajadores extranjeros. Según expone la AME, desde la entrada en vigor del acuerdo han llegado Mali 5 aviones chárter con 60 malienses cada uno (300 en total), mientras que tan sólo 29 ciudadanos de este país han tenido acceso a los contingentes.
La APDHA considera y denuncia que este tipo de situaciones demuestran una vez más la verdadera cara de la política de control migratorio y externalización de fronteras de España y la UE: la falta de respeto a los Derechos Humanos de las personas que son destinatarias últimas de las mismas (los migrantes) y la traslación, por medio de acuerdos internacionales basados en la evidente descompensación de poder político/económico, de la ejecución material de las señaladas políticas a países empobrecidos con una débil (o inexistente) arquitectura institucional democrática de defensa de los derechos fundamentales.