La delegación de Córdoba de la APDHA muestra su preocupación ante la reiterada solicitud de la Asociación de Propietarios y Empresarios de los Polígonos Amargacena–Torrecilla (APREAMA) de una ordenanza municipal que prohíba el ejercicio de la prostitución en la calle.
Desgraciadamente, la única solución respecto al complejo fenómeno de la prostitución que han encontrado las autoridades en las ciudades donde se han aprobado las ordenanzas municipales, es la de prohibir su ejercicio en la vía pública cerca de cualquier lugar habitado. Los empresarios de los polígonos Amargacena y la Torrecilla, quizás por el desconocimiento de la realidad de la prostitución, y arrastrados por la moda de implantar estas ordenanzas, solicitan activamente que se apruebe esta medida en la ciudad de Córdoba.
Esta asociación requiere más presencia de la Policía Local para evitar que estas mujeres ejerzan cerca de sus negocios, ya que consideran que daña la imagen de sus negocios. La Policía Local se ha comprometido a intensificar su presencia en la zona, pero recuerda que es un asunto competencia de la Policía nacional, por tratarse en la mayoría de los casos de mujeres de origen inmigrante.
Nuestra respuesta en cambio es la de pedir mayor atención a estas mujeres; debemos conocer cuáles son sus necesidades y apostar por políticas sociales, de formación, de capacitación que las permita de una vez por todas expresar sin vergüenza ni temor sus carencias. Y, por supuesto, es imprescindible que estas iniciativas estén dotadas presupuestariamente. Las políticas dirigidas al colectivo no pueden limitarse a una mera ordenanza municipal que prohíba el ejercicio de la prostitución y sancione económicamente al eslabón más débil, aislándolas e invisibilizándolas, convirtiéndolas en un blanco mucho más fácil de aquellas situaciones de explotación de las que en teoría se les quiere proteger. Estas medidas de carácter sancionador pueden provocar la paradoja de que las mujeres tengan que prostituirse para pagar las multas impuestas por ejercer la prostitución.
Las mujeres que ejercen la prostitución en Córdoba no están encontrando el apoyo suficiente de las distintas administraciones públicas. El Ayuntamiento no se ha definido públicamente respecto a la solicitud de ordenanza, pero tampoco ha hecho hasta el momento una apuesta real por políticas de inclusión.
La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) seguirá muy pendiente el desarrollo de este problema, no descartando ninguna vía, incluida la judicial, en el caso de que las autoridades competentes lleguen a aprobar esta Ordenanza municipal.
Córdoba, 15 de marzo de 2011