La APDHA exige una vez más un cambio de rumbo radical de las políticas migratorias y de control de fronteras de España y la Unión Europea que termine con el elevado número de muertos en nuestras costas.
Esta vez la injusticia y la falta del mínimo respeto a la dignidad humana han dejado sus efectos en España, en las rocas de la costa de Lanzarote. Hasta el momento son ya 25 los cadáveres recuperados en las costas de Lanzarote tras el naufragio de una patera del pasado domingo, y quizás nunca sepamos cuantas vidas más se hundieron en el océano en esta tragedia. La mayoría de los excluidos del “tablero global” ni siquiera en la muerte tienen derecho a salir del anonimato y el olvido.
Puede que este naufragio, entre los muchos que han convertido nuestros mares en inmensos cementerios de tumbas sin nombre, haya tenido más repercusión social por el hecho de que 18 de las víctimas fueran menores de edad. Siempre que se patentizan en el rostro de un niño los efectos devastadores que las políticas económicas, geoestratégicas y migratorias que se imponen desde el Norte al Sur parece que brota un sentimiento de difusa y efímera humanidad en las declaraciones políticas y mediáticas.
Pero desde la APDHA nos parece especialmente esclarecedor que este hecho haya coincidido con las órdenes impartidas desde el Ministerio del Interior de cubrir cupos de detención de inmigrantes en situación irregular colgadas en los tablones de las comisarías de policía de nuestro país, con una propuesta de reforma de la Ley de Extranjería que supone un nuevo recorte más (si cabe) a los derechos de nuestros conciudadanos de origen inmigrante y con las continuos anuncios desde el Ministerio de Trabajo e Inmigración de restringir tendiendo al 0 las ya de por sí irrisorias vías de entrada regular de las personas migrantes a nuestro país.
Y es esclarecedor porque pone de manifiesto, de una forma terrible y cruelmente clara, que esas muertes no son producto de la casualidad ni de desastres naturales. Existen responsabilidades políticas y económicas de estos dramas migratorios, que nada tienen que ver con el mal tiempo. Todas las vidas de niños, mujeres y hombres perdidas en mares y desiertos son consecuencia directa de políticas migratorias y de control de fronteras represivas y con fines exclusivamente securitarios, incompatibles con un verdadero respeto de los derechos humanos, por no citar las relaciones político-económicas globales que sumen en la pobreza a tres cuartas parte de la Humanidad.
Por ello, la APDHA exige una vez más un cambio de rumbo radical de las políticas migratorias y de control de fronteras de España y la Unión Europea -las cuales han demostrado ser ineficaces y crueles- que termine con este insoportable e indigno goteo de muertos en nuestras costas. Y denuncia que iniciativas como la Directiva Retorno a nivel europeo, el Pacto Europeo sobre Inmigración y Asilo, la reforma de la Ley de Extranjería, propuesta por el Gobierno del PSOE siguiendo la estela de la citada directiva (a pesar de sus reiteradas afirmaciones de que la misma no iba a tener ninguna incidencia en España) ni los cupos policiales de detenciones de personas inmigrantes en situación administrativa irregular no van desde luego en la dirección que una sociedad verdaderamente democrática y defensora de la plena vigencia de los derechos humanos debería desear para sus políticas de migraciones y fronteras. Es por ello que, también en este momento, exigimos la eliminación de todas esas iniciativas.
Andalucía, 19 de febrero de 2009