Mientras más viviendas se dediquen al turismo menos viviendas habrá en el mercado de alquiler, los alquileres se encarecen y las capas de población con menos recursos irán siendo desplazadas o expulsadas de los lugares donde esas familias han residido durante toda su vida.
Hace más de un año que en las alegaciones de la APDHA al Plan Municipal de Vivienda y Suelo planteábamos nuestras preocupaciones y opiniones sobre el fenómeno de la turistificación en Cádiz. La expansión a gran escala de las viviendas turísticas en España comenzó en las grandes ciudades, pero se ha extendido a todas aquellas que tienen atracción turística; está adoptando grandes dimensiones y tiene una gran capacidad de crecimiento debido principalmente:
1.- El coste de una cama de hotel es aproximadamente el doble del de una cama en vivienda turística y sin embargo lo que un inquilino puede pagar de alquiler en un mes lo saca en una semana una vivienda turística.
2.-Los vuelos de low-cost han ensanchado enormemente las capas de la población que pueden desplazarse a cualquier lugar del mundo a unos precios muy asequibles.
3.- La existencia plataformas internacionales (Airbnb, HomeAway…) que a través de internet pueden hacer llegar hasta el último rincón del mundo las ofertas de esas viviendas.
A la vista de tales posibilidades y atractivos económicos muchos propietarios optan por retirar sus viviendas del mercado de alquiler y dedicarlas al turismo. También los poderosos fondos de inversión internacionales invierten en una actividad tan rentable sin importarles las consecuencias que acarreen, las cuales son evidentes. Mientras más viviendas se dediquen al turismo menos viviendas habrá en el mercado de alquiler, los alquileres se encarecen y las capas de población con menos recursos irán siendo desplazadas o expulsadas de los lugares donde esas familias han residido durante toda su vida.
La ciudad de Cádiz es a este respecto especialmente vulnerable. Como ha publicado recientemente la prensa, es la ciudad con menos pisos a la venta por debajo de 150.000 euros y que solo está por detrás de Barcelona, Madrid, Bilbao, Palma de Mallorca y San Sebastián, todas ellas ciudades con una renta per cápita netamente superior. Algo parecido pasa con el precio del alquiler, ya que de las ciudades andaluzas con más de 100.000 habitantes solo es superada por Málaga, Sevilla y Marbella. Todo ello agudizado por la escasez de suelo para la construcción de vivienda nueva.
El panorama que dibujamos no está guiado por visiones catastrofistas de la realidad, basta comprobarlo en las mayores ciudades españolas que se han visto obligadas a poner en marcha ordenanzas y medidas encaminadas a impedir el desastre mediante una regulación adecuada al fenómeno que nos ocupa. Y es importante dejar claro que no estamos en contra del turismo, lo consideramos un componente necesario para el desarrollo, el empleo y el nivel de vida de los gaditanos. Lo que está en discusión es el tipo de turismo que más conviene a Cádiz y la regulación de un fenómeno que dejado de la mano puede desembocar en una burbuja como lo fue la burbuja inmobiliaria.
En las mencionadas alegaciones al Plan Municipal de Vivienda y Suelo, realizadas el 13 de noviembre de 2.018, mostrábamos nuestro pleno apoyo a las medidas contenidas en el mismo respecto a las viviendas turísticas y que constaban de 3 fases:
a.- Elaboración de un estudio técnico de análisis y diagnóstico del sector.
b.- Elaboración y aprobación de una Ordenanza de Viviendas de Uso Turístico.
c.- Aplicación seguimiento y control de lo establecido en la Ordenanza.
También alegábamos que: “Al ser un tema controvertido y delicado con grandes y poderosos intereses en juego, se necesita un tiempo suficiente para el estudio y análisis del sector y posteriormente la elaboración y aprobación de la Ordenanza. Al ser un fenómeno con una enorme capacidad de expansión, durante ese tiempo, pueden ponerse en marcha cientos de viviendas y de expulsiones de familias de donde han vivido durante toda o casi toda su vida. Por todo ello y como ya hicieron anteriormente ciudades como Barcelona, Madrid y otras es necesario aprobar una moratoria del otorgamiento de licencia: no conceder ninguna licencia durante todo el tiempo que transcurra hasta la aprobación de la Ordenanza”.
La alegación fue presentada en noviembre de 2.018. El estudio técnico de análisis y diagnóstico del sector fue redactado y entregado al Ayuntamiento el 17 de septiembre de 2.019 y el 23 del mismo mes presentado a la opinión pública. Consideramos el informe bastante correcto y contiene toda la información significativa para toma de decisiones por parte del Ayuntamiento. Ahora que conocemos el estudio técnico nuestra reivindicación de moratoria se concentra en aquellas zonas que están al borde de la saturación, aunque posiblemente alguna ya ha traspasado el límite. Dichas zonas son principalmente San Juan de Dios, San Francisco, Plaza de Mina, San Antonio, Catedral y Barrio La Viña y cualquier otra que con el paso del tiempo estén al borde de la saturación. En cualquier caso, el tiempo transcurre, el fenómeno sigue campando y desarrollándose a sus anchas sin que se adopten medidas para controlarlo mediante la regulación del mismo.
Por todo lo anterior pensamos que nuestra reivindicación de moratoria en los otorgamientos de licencia continúa siendo más necesaria cada día para evitar el aumento del coste de los alquileres, la expulsión de los estratos más vulnerables de la población y la pérdida de la identidad e idiosincrasia de nuestra ciudad.